La autoestima de tu hijo

La autoestima se forma en la infancia, la imagen que los niños tienen de si mismos es la imagen que proyectan de él los mayores más cercanos, por eso es muy importante la manera de comunicarnos con los niños. Cualquier persona que tenga el rol de educador como padres, formadores tienen que tener mucha atención en la comunicación que tienen con los niños.
Cuando un niño tiene una buena autoestima, se sabe valioso y competente.
Entiende que aprender es importante, con lo cual no se siente disminuido cuando necesita ayuda.
Es responsable, se comunica bien y es capaz de relacionarse adecuadamente con otros.
Un niño con baja autoestima no confía en sí mismo y por lo tanto tampoco en los demás. Suele ser tímido, hipercrítico, poco creativo y en ocasiones puede desarrollar conductas agresivas, de riesgo y desafiantes. Esto provoca rechazo en los demás, lo que a su vez repercute en su autovaloración.
Es importantísima la consideración y crítica que reciba por parte de los adultos, sobre todo de aquellos más significativos para el niño.
Nuestro consejo:
- Elogiar a tus hijos: Los elogios deben ser específicos y sinceros para que tengan un efecto positivo. Lo que importa es que los padres se concentren en las cosas positivas que hacen sus hijos, no en las cosas negativas. Las críticas y los rechazos por parte de los padres suelen tener como consecuencia que los hijos tengan poco autoestima.
- Tratarlos con respeto: Una manera importante en la que los padres pueden mostrar respeto a sus hijos es poniendo cuidado en lo que les dicen. Los padres deben empezar a mostrar respeto a sus hijos diciendo “por favor” y “gracias”. También los padres deben pedir que sus hijos hagan lo mismo cuando sea necesario.
- No pedirles la perfección: Los niños necesitan saber que sus padres los aceptarán tal y como son, con fallos y todo. Tal aceptación ayuda a los niños a sentirse seguros de si mismos, lo que resulta en el desarrollo de una imagen positiva.